El uso de la telemedicina en España

El acceso a la atención médica ha evolucionado drásticamente gracias a los avances tecnológicos. Anteriormente, la única opción para consultar a un médico era acudir a una cita presencial. Hoy en día, la telemedicina permite a las personas superar barreras geográficas y recibir asesoramiento especializado de forma remota.

Ahora bien, ¿qué es la telemedicina y cómo funciona?, ¿realmente responde a las demandas actuales?, ¿cuál es su marco legal en España? Todas esas cuestiones serán analizadas en las siguientes líneas.

Qué es la telemedicina

La telemedicina es la prestación de servicios de salud a distancia. Bajo esta modalidad, se utilizan las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) con el propósito de facilitar el intercambio efectivo de datos entre los profesionales y pacientes.

Se trata de diagnosticar, tratar, prevenir enfermedades, investigar y educar. Todo esto, a fin de mejorar la salud individual y comunitaria. Dicha práctica permite a los usuarios tener consultas con sus médicos sin la necesidad de estar físicamente presentes en el mismo lugar.

Las herramientas tecnológicas ayudan al médico a diagnosticar y tratar problemas de salud. Especialmente, en casos crónicos como diabetes, hipertensión u otras patologías similares que requieran de un seguimiento regular.

“Nuestra obsesión en telemedicina pasa por democratizar la salud para garantizar accesibilidad para todas las personas, con un uso fácil, independientemente de sus capacidades y sin necesidad de descargar aplicaciones, por dar un servicio con la calidad humana, sin esperas y haciendo que la tecnología sea un mero medio, un apoyo que agiliza pero que pasa desapercibido para que el protagonismo esté en el acto médico, en el profesional sanitario y el paciente y, por último, con los máximos estándares de seguridad de la información y los datos”. Rafael García, Founder & CEO de Ever Health

Tipos de telemedicina

La telemedicina ha avanzado de manera simultánea con el progreso tecnológico y se divide en varios tipos:

Teleconsulta o Videoconsulta

La teleconsulta es una forma de atención médica a distancia en la que los pacientes se comunican con los profesionales y especialistas a través de la tecnología digital. Por ejemplo, a través de videollamadas o aplicaciones móviles. Durante la consulta, es posible discutir los síntomas, realizar evaluaciones y proporcionar recomendaciones.

Esta práctica facilita el acceso, sobre todo en áreas remotas o con movilidad limitada. Además, promueve la continuidad del cuidado ya que favorece el desarrollo de seguimientos regulares sin necesidad de desplazarse físicamente a un consultorio.

En nuestro caso, trabajamos con la posibilidad de realizar consultas por Chat, por Videoconsulta o como Teleconsulta, utilizando también dispositivos de alto alcance, incluidos dentro del Kit de telemedicina, como el estetoscopio que funciona en remoto, la cámara de exploración, un tensiómetro, termómetro digital o pulsioxímetro, entre otros.

Telemonitorización

La telemonitorización se sirve de distintos dispositivos para supervisar continuamente la salud de los pacientes. Gracias a esta tecnología, los médicos pueden hacer un seguimiento efectivo de diferentes enfermedades crónicas.

Mediante avances tecnológicos, es posible monitorizar variables fisiológicas vitales, como el ritmo cardíaco o los niveles de insulina. El especialista obtiene datos en tiempo real que le sirven para realizar una gestión más precisa de la salud, una detección temprana de problemas y una mejora en la calidad de vida del paciente.

Telecirugía

La telecirugía utiliza tecnologías avanzadas para realizar operaciones quirúrgicas a distancia. Permite la visualización en directo de la operación, la comunicación entre cirujanos y la manipulación de equipos robóticos. Se divide en:

Telementoría: básicamente, se trata de asistencia remota de especialistas durante cirugías. Se usa tecnología para guiar a cirujanos en procedimientos.
Telepresencial: cirujanos realizan intervenciones y emplean dispositivos remotos (brazos robóticos, cámaras microscópicas y más).

Ventajas y beneficios de la telemedicina

La telemedicina se ha convertido en un recurso valioso en el ámbito de la atención médica. Entre sus numerosas ventajas se encuentran:

Acceso remoto: permite a los pacientes de áreas rurales o con movilidad reducida acceder a atención médica sin la necesidad de desplazarse.
Mayor eficiencia: reduce los tiempos de espera y el tiempo de viaje tanto para pacientes como para profesionales y especialistas sanitarios.
Formación a profesionales sanitarios: contribuye a la educación y capacitación de los trabajadores de la salud.
Seguimiento continuo: ayuda a supervisar y a seguir de cerca la condición médica de los pacientes a través de herramientas y dispositivos especializados.
Gestión y dirección de sistemas de salud: promueve la organización y el liderazgo en operaciones dentro de instituciones médicas y sistemas de atención sanitaria.
Reducción de costes: disminuye los gastos asociados con visitas médicas presenciales, como el transporte y el tiempo perdido en el trabajo.
Facilita la consulta especializada: esta modalidad posibilita las consultas con especialistas, independientemente de la ubicación geográfica del paciente, ampliando así el acceso a la experiencia médica especializada.

Funcionamiento de la telemedicina en España

La irrupción del Covid-19 impulsó notablemente la adopción de la telemedicina en España. Cada día más pacientes optan por la teleconsulta, principalmente debido a la saturación en el sistema de salud público. Esta práctica ha sido especialmente notoria en comunidades como Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid.

La telemedicina ha integrado avanzados equipos conectados, como robótica, sensores e IoT. Todo esto favorece el desarrollo de consultas remotas y la realización de un seguimiento más efectivo de los pacientes. Dicho de otro modo, contribuye a mejorar la calidad de la atención médica.

Por otro lado, las redes móviles de alta velocidad y la digitalización de operaciones hospitalarias son prioritarias para su óptimo funcionamiento, al igual que aplicaciones virtuales como la receta electrónica y la historia clínica digital.

Ámbitos de aplicación de la telemedicina en España

La telemedicina está en pleno auge en España, con múltiples áreas de aplicación por ejemplo en escuelas infantiles, hoteles, empresas, etc. Es evidente su impacto en especialidades como pediatría, ginecología, dermatología y psiquiatría, así como en la atención primaria, el primer punto de contacto.

Aunque la telecirugía está en desarrollo, son pocos los proyectos en marcha. Para llevarlos a cabo, se requieren tecnologías avanzadas como las redes 5G, combinadas con experiencias inmersivas, realidad virtual y robótica.

Todas estas herramientas son imprescindibles para garantizar la precisión y seguridad en los procedimientos quirúrgicos a distancia.

Regulaciones y marco legal de la telemedicina en España

En España, se ha trazado la hoja de ruta de la Estrategia España Digital 2025. Aquí, la salud virtual surge como un eje importante. Esta estrategia aborda el tema sanitario dentro de la ciberseguridad y el fortalecimiento de competencias digitales del personal involucrado.

Además, se pretende promover la conectividad digital y el despliegue de tecnología 5G para beneficiar al sector sanitario. En paralelo, la digitalización abarca proyectos específicos como la innovación, investigación, asistencia y el empoderamiento del paciente en el ámbito de la salud.

La Estrategia de Salud Digital del Sistema Nacional de Salud tiene varios propósitos bien definidos:

Mejorar la atención sanitaria.
Promover la participación ciudadana y la eficiencia del sistema.
Gestionar adecuadamente los datos.
Adaptarse a las necesidades actuales de la sociedad.

No obstante, pese a los avances, España carece de una legislación específica para regular la telemedicina. La falta de una normativa unificada dificulta su implementación, a pesar de que el país destaque en la prestación de servicios sanitarios a distancia.

Mientras tanto, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) insta a España a promulgar una legislación nacional al respecto. Cabe destacar que otros países ya han tomado medidas en este sentido.